Lobo aullador ( Lupus Ruidosus ) 20/6/2003


Este habitante de las estepas y los bosques literarios es un bello animal de aspecto intimidante y agudos colmillos que gusta de expresar sus instintos destructores aullando a la luz de la luna y amenazando a los rebaños desde una prudente distancia, por lo que no se come ni una rosca y perece de hambre o bien termina como perro de guarda de alguna importante institución animal. En su juventud, el Lobo aullador ama la jarana y el ligue con cualquier hembra que se ponga al alcance de su rabo, pero no suele llegar al apareamiento a causa de su afición a la bebida, que le hace ladrar de forma incoherente en vez de emitir sus majestuosos aullidos. Esta peculiar característica, sin embargo, le salva el pellejo en las juergas lobunas, al ser generalmente confundido con un perro abandonado, lo que le permite la fuga. Si sobrevive a estos años locos, el lobo aullador suele manifestar su singular talento para explotar su imagen de rebelde, no siendo raros los especímenes que reciben las máximas distinciones y acaban residiendo en doradas jaulas, tan distantes de las perreras municipales como de los salvajes lugares en que nacieron.