Borrego lamedor (Lameculus Prodigus) 13/6/2003

Este borrego de suaves lanas blanquecinas es muy común entre los pastos del planeta literario, habiendo al menos uno en cada rebaño. Muchos pastores los utilizan para limpiarse el culo con sus lametazos, de donde proviene su nombre latino. Es un animal paciente que siempre está detrás de su dueño, balando melifluamente y señalándole con el hocico aquellos otros borregos que se apartan de la manada para que los perros vayan a por ellos. Su apego a su propietario es tan grande que, con tal de sentir el contacto de sus manos, se deja esquilar, orinándose de gusto, por que lo que es conveniente efectuar la operación aparte de los demás animales. A pesar de su pacífico aspecto es muy traicionero, delatando inmediatamente con sus balidos a cualquier borrego forastero que pretenda introducirse en el rebaño. La calidad de su lana es baja y su leche acuosa, pero su producción es abundante, por lo que ambos productos, mezclados con detritus de todo tipo, se emplean frecuentemente para la confección de quesos y trapillos que se venden baratos con la finalidad de crear un mercado poco exigente, susceptible de absorber cualquier cosa que el fabricante ofrezca. Como justa recompensa a su servicial comportamiento, son siempre premiados en los concursos de balidos que periódicamente los pastores organizan.